Abstract
La investigación nace del interés y la percepción que tenemos sobre el espacio público y sus variables. Estando relacionadas con la distancia recorrida a pie, las distancias mínimas entre peatones y las infraestructuras urbanas que repercuten en nuestros desplazamientos. Como punto de partida analizamos el comportamiento humano en el espacio público. Se propone un análisis empírico y representativo, a través de visualizaciones, mapas y cartografías georeferenciadas basadas en experiencias personales en entornos urbanos. El objetivo es comprender la repercusión del diseño urbano en las diferentes experiencias y situaciones espacio-temporales. Se hace una comparación entre las situaciones de normalidad y las posteriores a la pandemia de Covid-19. El caso de estudio analizado es calle Gran Vía, una de las avenidas más importantes y concurridas de Madrid. Situada en el centro histórico de la ciudad, cuenta con una extensión de 1314,31 Km. y una superficie de 17749,80 m2. Los datos, así como las encuestas analizadas inicialmente nos sirven para comprender el ámbito del análisis. En última instancia se hace uso de la fotogrametría y la simulación de movimientos de los peatones como herramientas para comprender cómo las personas pueden moverse en un espacio concreto. El uso de estas herramientas se van utilizando simultáneamente junto a las variables del entorno urbano extrayendo finalmente patrones de comportamiento humano que adoptamos en el espacio público.