Abstract
En el presente trabajo se analiza la capacidad de adaptación al clima cálido de cuatro variedades tintas de vid (Vitis vinifera L.): Garnacha Peluda, Rufete, Bruñal y Moravia y
se las compara con la variedad Merlot. Estas variedades, a día de hoy, tienen poca presencia en el territorio nacional y se consideran minoritarias. Teniendo en cuenta la especial vulnerabilidad de la península ibérica al cambio climático ,
resulta importante avanzar en el estudio de la adaptación de nuestra agricultura a condiciones más cálidas y a un menor uso de recursos hídricos (IPCC AR5, 2014). Esta capacidad de adaptación en las distintas variedades, se ha medido y comparado en base a distintos parámetros como son: el estado hídrico de las plantas, contenido de humedad del suelo, temperatura, déficit de presión de vapor (DPV), desarrollo vegetativo (área foliar y suelo sombreado) y rendimiento y composición del mosto. La estación meteorológica instalada en la parcela proporcionó los datos climáticos necesarios, mientras que el estado hídrico del suelo se ha medido con FDR y el estado hídrico de la planta se ha medido a partir del potencial hídrico del tallo a mediodía solar. Medir el estado hídrico y desarrollo vegetativo de la planta durante una campaña (en este caso 2020) no es suficiente para conocer la capacidad de adaptación de una variedad, sino
que además es necesario conocer la evolución de la maduración de las bayas, producción final en vendimia y cualidades finales tanto del mosto como del vino, relacionando también estas cualidades con los datos que se han medido durante el desarrollo de la planta y el
fruto. Para ello se han realizado e interpretado los análisis de sólidos solubles totales, acidez titulable, pH, contenido de taninos, antocianos, índice de polifenoles totales y madurez de las pepitas. Finalmente, para poder valorar las cualidades del vino que pueden producir estas variedades bajo condiciones de clima cálido, se ha procedido a la elaboración de las correspondientes microvinificaciones y al análisis de los vinos obtenidos. Las variedades estudiadas han dado resultados distintos. Destacando la variedad Moravia por sus cualidades agronómicas ideales para clima cálido y por tener también unas cualidades enológicas aceptables. Las otras tres variedades minoritarias estudiadas, han presentado distintas deficiencias ya sea a nivel agronómico o enológico. Como era de esperar, Merlot presentó unas cualidades enológicas muy buenas y superiores
a las del resto de variedades, sin embargo su producción no fue suficiente para considerarla ideal.