Citation
Guerra Pestonit, Rosa Ana
(2005).
La bóveda del presbiterio de la iglesia del Colegio del
Cardenal de Monforte de Lemos.
In: "Cuarto Congreso Nacional de Historia de la Construcción", 27-29 de enero de 2005, Cádiz. ISBN 84–95365–54–5.
Abstract
El Colegio de Nuestra Señora de la Antigua fue fundado
en 1593 por el cardenal don Rodrigo de Castro,
que le asignó este nombre debido a su devoción por
la Virgen venerada en la catedral de Sevilla, ciudad
de la que era arzobispo. Este nombre apenas se utiliza
y se conoce a este edificio como el Colegio del
Cardenal, también de la Compañía (los jesuitas fueron
la primera congregación que lo regentó), o de los
Escolapios, nombre de la comunidad que lo ocupa en
la actualidad.
Fue concebido a imitación del monasterio de El
Escorial y constituye el ejemplo más importante de
la eclosión del clasicismo herreriano en Galicia. Su
construcción supuso una nueva concepción arquitectónica
de intervenciones unitarias con proyectos acabados
y resueltos en su totalidad, sin posibilidad de
añadir elementos ajenos a su estilo.
Fue en las provincia de Lugo y Ourense donde se
inició este foco herreriano que llevarían a cabo arquitectos
castellanos y santanderinos, relacionados con
Juan de Herrera por la construcción de la catedral de
Valladolid o El Escorial. Fue un estilo que en Galicia
no llegó a cuajar y, como ejemplo, no se volvió a
construir una cúpula trasdosada completa como la de
El Cardenal.
Las obras se desarrollaron con varias paralizaciones
y cambios de arquitectos. El edificio permaneció
inacabado hasta el primer cuarto del siglo XX. Sufrió
saqueos, incendios y pasó por etapas de abandono y
casi ruina.1 Sus fábricas presentan movimientos que
tradicionalmente se atribuyen al terremoto de Lisboa
de 1755. Los daños que causó en la cúpula requirieron
intervenciones en el tambor en 1786 y en la linterna
en 1841; hubo una intervención general de gran
alcance en 1919 (Martínez González 2000), y se corrigieron
problemas estructurales de la escalera principal
en 1994.
En la bóveda del presbiterio varios sillares aparecen
descolgados de su posición. En el testero del
presbiterio hay una gran grieta vertical, atribuida al
terremoto, que pudo haber causado el movimiento de
la bóveda. En los años ochenta se realizaron intervenciones
importantes en las cubiertas que pudieran
haberle afectado.
Este trabajo afronta el levantamiento y análisis
constructivo de esta bóveda. Se encuadra dentro de
un estudio más amplio que conducirá a dictaminar la
pertinencia y, en su caso, características de una intervención
de reparación.